miércoles, 8 de agosto de 2007

El bosque de piedra de Huayllay, una maravilla natural en Perú




En el corazón de la meseta andina y a 4.000 metros sobre el nivel del mar se encuentra el bosque de piedra más grande del mundo, una de las sorprendentes maravillas naturales casi desconocidas de Perú. El Santuario Nacional de Huayllay, 350 kilómetros al este de Lima y cercano a la ciudad de Cerro de Pasco, capital minera de Perú, cuenta con 6.815 hectáreas y reúne más de 4.000 formaciones rocosas que semejan gigantescos perfiles humanos, como el caminante o pensador, y animales, como la tortuga, la alpaca, el cóndor y el elefante

Los farallones están formados, en su mayoría, por roca volcánica, y también de sedimentos, dado que esta zona fue parte del fondo marino en el Paleozoico.

Sus microclimas permiten el cultivo de papa (patata) en las altitudes de la puna andina y brindan hábitat a una fauna compuesta por venados, vizcachas (liebre andina), gatos monteses, pumas, zorros, gavilanes, perdices y pájaros carpinteros autóctonos.

La flora de este preciado santuario la constituyen pastos amarillos y gruesos, llamados 'ichu', que sirven de alimento al ganado; además de plantas con propiedades curativas como el berro, el hercampuri, los queñoales y las huamanpintas.

A este recóndito lugar, al que se accede tras un largo viaje de diez horas por carreteras y caminos, comenzaron a llegar turistas en viajes organizados hace sólo siete años, cada mes de septiembre y por iniciativa de las autoridades regionales que decidieron organizar el denominado 'Rural Tour'.

El alcalde Huayllay, Jesús Muñoz, detalló a EFE que de esta manera el turista llega a compartir las tradiciones por medio de ceremonias de invocación a los 'jircas', dioses andinos del bosque, y de hoja de coca, que forma parte de un 'pago' a la 'mama-pacha', la madre tierra.

'Tenemos algo único, que pasa por la belleza del paisaje, la reciprocidad de la población y la gran variedad de productos, por eso es grande la expectativa de que Huayllay se conozca en el mundo', señaló el alcalde Muñoz.

La guía Dalia Roque explicó a EFE que la reserva tiene once rutas bien señaladas, las más fáciles pueden demandar un recorrido de entre tres y cuatro horas.

Otro buen conocedor de la zona, Máximo Roque Lazara, dispone de un registro fotográfico de las formaciones rocosas desde 1954, lo que le ha permitido catalogar hasta el momento unas 500 figuras y publicar el libro 'Una maravilla turística', editado por la Universidad Daniel Alcides Carrión, de Pasco.

En este original bosque vive Cristóbal Alcibiades, también guía turístico y que da cuenta a los visitantes de las rutas y los secretos del lugar.

'Desde 1992 se ha incrementado el turismo, aunque en forma lenta.Pero desde que yo era niño llegaban los gringos (estadounidenses) a mi casa, donde tengo un pequeño refugio con comidas típicas', comentó el lugareño.

En Huayllay también se disfruta de sabrosos platos como la Pachamanca (carnes y papas cocidas con piedras calientes y hierbas aromáticas), el Shihuayro (maíz molido y especias como el ají), el Mondongo (menudencias de cordero y maíz) o el cuy picante (roedor andino frito acompañado de papas y crema de maní).

Una de las máximas expresiones culturales son las danzas, como la denominada 'los negritos de Huayllay', que recrea la vida de los esclavos africanos llevados durante la colonia española hasta las alturas andinas para trabajar en las fundiciones.

Huayllay también cuenta con las fuentes de aguas termales medicinales de La Calera, Goshpi y Yanahuato y con los restos arqueológicos de Bombomarca.

En referencia a las dificultades para acceder al lugar, el director regional de Comercio y Turismo de Pasco, Braulio Yupanqui, indicó a EFE que se está fomentando entre la población 'la conciencia turística' y se está trabajando por la mejora de las vías de acceso y la instalación de casas de hospedaje brindadas por los comuneros.

'Sólo queda invitar a los viajeros a que vengan a conocer el museo geológico más grande y alto del mundo', comentó.

El Santuario Nacional de Huayllay fue establecido en 1974 con el objetivo de preservar las formaciones geológicas y conservar su flora y fauna, además de sus pinturas rupestres y restos arqueológicos.

En 1997 fue declarado Zona de Interés Turístico Nacional y en 2001 Patrimonio Cultural de la Nación.

fuente: http://www.peru.tk/modules/news/article.php?storyid=1467.